lunes, 12 de septiembre de 2011

No hay ninguna edad en la que dejemos de cambiar el cerebro. Lo único que detiene su evolución es el hábito de pensar, actuar y sentir del mismo modo por el resto de tu vida.


1 comentario:

way dijo...

Deduzco que se trata de ser fiel a uno mismo hasta el final de la propia existencia. ¿o no?